Santo Tomás de Aquino, filósofo católico del siglo XIII
Santo Tomás de Aquino, filósofo católico del siglo XIII, es, como ya sabéis, una de esas montañas del pensamiento universal. Uno de esos indiscutibles junto a Platón, Aristóteles, Leibniz, Kant, Hegel, y quizás Wittgenstein. (Puede que me deje alguno, pero sobrar no sobra ninguno). Si algo tienen en común todos los filósofos clave, que se cuentan, como digo, con los dedos de las manos, es que son filósofos que tratan la totalidad. No se especializan en el cerebro de la sanguijuela sino en el Ser en toda su extensión. Son los autores de las grandes preguntas y de las grandes respuestas. Los que se ocupan de lo importante. De todo lo que es el hombre, de su universo, sin perderse en reflexiones concretas sobre hechos temporales. Por eso se puede leer a cualquiera de ellos en cualquier momento, en cualquier circunstancia, porque su obra está fuera del tiempo. Leyéndolos te das cuenta de que, aun pensando toda la realidad, están fuera de la cuarta dimensión, la temporal, y sus reflexiones ...